Un lujo adornado en plata y oro
Hoy quiero compartir con ustedes qué es el chapeado dentro de las costumbres gauchescas. El chapeado era y es el mayor lujo del gaucho y consistía en un apero o recado cuyas riendas, cabezadas, bozal y cabestro se adornaban con bombas, pasadores y virolas de plata unidos con adornos de oro. La cabecera de éstos, en la parte de los bastos, está finamente trabajada y lleva una tapa del mismo metal con las iniciales del dueño. También solían ser de plata las copas del freno y la pontezuela, el pretal, los estribos y el mango del rebenque, las espuelas y cuchillos, que hoy en día el hombre de campo le gusta tener dentro de sus posibilidades.
Les cuento que yo, en una vitrina que ocupa un lugar importante dentro de mi casa, tengo un chapeado de oro y plata, herencia de mi padre, un gaucho de verdad que pertenecía a un club llamado Círculo Criollo “El Rodeo”, club que existe todavía. Recuerdo que poquito a poquito logró armar este chapeado, y con mucho orgullo lo lucía en los desfiles camperos y peregrinaciones a Luján para homenajear a la Virgen. ¤