Vive la emoción y la tradición del folclore
Sin lugar a dudas, el baile del gato ocupa el primer lugar con una gran popularidad dentro del gauchaje. Es un baile rápido, lleno de picardía. Tiempo atrás se lo conocía como “mis-mis”. El gato con relaciones era muy bailado en fiestas caseras, como así también en pulperías.
Aquí le muestro algo de la picardía criolla, tanto por parte del paisano, como de la paisana.
Él comenzaba diciéndole:
Si vos fueras pasto verde
Y yo fuera mancarrón,
Yo me moriría de hambre
Por no darte un mordiscón.
Y ella le contestaba:
Vuela el chimango y el tero
Y también el picaflor
Y si los pavos volaran
También volarías vos.
El gato polqueado también tuvo gran popularidad. Su única diferencia con los anteriores consiste en que cumplido el paseo preliminar, el zapateo y las relaciones, los bailarines que hasta ese momento han bailado separados o sueltos, se enlazan y finalizan la danza con unas vueltas de polka, baile que fue introducido en Argentina a mediados del siglo 18. Se debe de tener en cuenta también que cada región modificó en cierto modo la coreografía.
Para finalizar les digo:
Qué lindo es bailar un gato
Bien juntito a nuestro amor
Y regalarle una flor
Y decirle que la quiero.
Que viva el gato campero
¡Y Viva la tradición! ¤