Hace unas semanas la Cancillería Argentina le suministró a varios medios argentinos el resultado provisorio del voto de los argentinos en el exterior, en los que el presidente saliente Mauricio Macri le ganó al candidato del opositor Frente de Todos, Alberto Fernández, por el amplio margen de 75% a 16% de los votos emitidos. ¿Por qué este resultado, tan distinto al 48% a 40% a favor de Alberto Fernández que se registró en las mesas ubicadas en territorio nacional? De eso se trata esta nota.
La primera novedad importante es que un récord de 49.300 argentinos participaron con su voto desde fuera del país, de los cuales 9.000 lo hicieron a través del novedoso sistema del sufragio por vía postal.
Recordamos a los lectores que en el 2017, el presidente Mauricio Macri firmó un decreto que eliminaba la necesidad de inscribirse previamente en un registro especial si se quería votar en un consulado, y a partir de ese momento el único requisito para presentarse a votar en un consulado es tener declarado en el Documento Nacional el domicilio del exterior y estar viviendo dentro de la jurisdicción del consulado. También es una novedad reciente la introducción del voto por correo, que le simplifica mucho las cosas a los que viven lejos de un consulado argentino. Estas novedades permitieron que se aumentara mucho el número de votantes, aunque -al no ser el voto obligatorio- los porcentajes frente al padrón total siempre van a ser mucho menores que los del territorio argentino.
España, con 93.546 argentinos empadronados, y Estados Unidos, con 92.141, son los dos países con mayor número de argentinos residiendo en el extranjero con capacidad de ejercer su derecho al voto.
De esos dos países, en esta elección 2019 se registraron más votos en Estados Unidos: 12.111. Ahí Macri sumó 10.872 votos, aproximadamente el 90%, mientras que la fórmula del Frente de Todos, con apenas 802, el 7%. Una verdadera paliza. Las demás fuerzas y los votos en blanco se repartieron el resto.
España fue otro lugar en el que hubo récord histórico de argentinos que se acercaron a votar. En total fueron 9.012 ciudadanos. De ese número, el 69% (6.233 personas) eligió al candidato de Juntos por el Cambio (Macri), mientras que 21% (1.955) optaron por el candidato del Frente de Todos. Y el Frente de Izquierda le ganó con 261 votos a Consenso Federal, que sumó 231
En los consulados de todos los países limítrofes, Paraguay, Bolivia, Brasil, Uruguay y Chile, donde también hubo un número significativo de votantes, el resultado fue parecido al de España, siempre un triunfo de Macri con más del 65% de los votos. En Israel, otro país que tiene una población argentina significativa, Macri ganó con el 86% de los votos. Se informa que de los 82 países donde hubo argentinos votando, Macri ganó en 70 países, Fernandez en 6, Roberto Lavagna en 2, y hubo empate en 4.
¿Cómo habría que interpretar estos resultados? Hay dos factores principales. El primer factor es que estos votantes que viven en el exterior, aunque sea en países limítrofes, no recibieron el impacto directo de los resultados de la política económica del gobierno de Macri, aunque no están totalmente inmunes, ya que muchos tienen negocios, propiedad, o familiares en Argentina que ayudan a mantener. Pero no es lo mismo eso que estar dependiendo en forma total de la política de ingresos del Estado Argentino, o tener que vivir de ingresos en pesos sujetos a la inflación. Hay que agregar aquí que en líneas generales el aumento en el poder adquisitivo del dólar del último año y medio de la gestión Macri benefició a los argentinos del exterior.
El temor al cepo
Quizás el factor principal que decidió el voto fue la libertad cambiaria y para hacer transferencias internacionales, en contraste con el triste recuerdo del cepo al dólar. Estamos hablando de argentinos que, si bien viven en el exterior, están muy ligados a la Argentina. Muchos envían dinero, viajan seguido a lo que sigue siendo su patria, cobraron sucesiones, y a veces tienen negocios con alguna pata argentina. El cepo al dólar y los límites a las transferencias internacionales que se mantuvo durante todo el segundo mandato de Cristina Kirchner los afectó negativamente, y a la hora de votar queda claro que no aceptaron las promesas del candidato Alberto Fernández, socio de Cristina, de que el cepo fue algo negativo que no debería volver. De hecho, la victoria del Frente de Todos generó semejante fuga de capitales que fue necesario instalar de nuevo el cepo para evitar que la Argentina se quede sin reservas antes de diciembre.
Todo indica que este nuevo cepo instalado después de las elecciones va a durar por lo menos hasta que se aclare el panorama financiero del país. En fin, otros motivos que podrían explicar el resultado de las elecciones entre los votantes del exterior son los malos recuerdos que genera el último gobierno K, como las trabas formales e informales que existieron al comercio internacional y todo un clima desfavorable a los negocios internacionales. Los argentinos que viven en el exterior siempre quieren ver buenas relaciones entre la Argentina y el mundo, y para eso el gobierno de Macri ofrece mejores garantías. También prefieren que la Argentina siga con el orden constitucional que ya conocen, garantizado por Juntos por el Cambio, y que no que existan experimentos. ¤