Javier Milei. Diputado, economista y rockstar

Sus radicales propuestas, su look estrafalario y sus insultos convirtieron a este mediático personaje en diputado nacional

El economista Javier Milei fue electo diputado nacional por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en las últimas elecciones legislativas de noviembre. La lista que encabezó Milei con su partido, “La Libertad Avanza”, quedó como tercera fuerza de la ciudad más importante del país, al obtener el 17% de los votos, solo detrás de Juntos por el Cambio que sacó el 47% (Macristas/Radicales) y del Frente de Todos con 25% (Kirchnerismo/Peronismo).

La primera incursión en la política de Javier Milei fue todo un suceso, porque casi sin invertir dinero en la campaña, logró su objetivo: obtener una banca en el parlamento nacional en su primer intento.
Cabe aclarar que Milei no era un desconocido que irrumpió imprevistamente. Durante los años previos, fue una figura muy destacada en varios medios. Lo que se dice, un verdadero rockstar de la economía, invitado cotidiano de casi todos los programas económicos, de actualidad y noticias. Esto explica por qué, al momento de las elecciones, los votantes de la ciudad lo conocían muy bien.
Con un currículum académico de primer nivel, sumado a su verborragia, gesticulaciones, agresividad verbal y afirmaciones estrambóticas, se convirtió en un personaje interesante y hasta divertido para la audiencia. Como levantaba el rating, era invitado permanente en los principales programas de televisión del prime time. Siempre vestido con el mismo traje negro a rayas, exhibiendo una exuberante cabellera negra despeinada y sus ojos celestes, Milei se destacaba visualmente.
En todos los medios donde se presentaba, este profesor universitario de economía esgrimía consignas radicales contra las prebendas y beneficios de la parasitaria “casta política”, lo mismo que contra el Banco Central de la República Argentina, al cual demonizaba y acusaba de generar todos los males de la economía del país, a tal punto que Milei nunca dejaba de afirmar que, de ser posible, lo dinamitaría personalmente. Una encuesta reciente del 2022 destacó el alto conocimiento que tienen del diputado en todo el país. Siendo un claro representante de la derecha política, posee una imagen positiva que en once provincias ya supera a la negativa.
Sus afirmaciones confirman su pensamiento: “Mi alineamiento con (Donald) Trump y (Jair) Bolsonaro es casi natural”, dijo este economista liberal al diario O Globo de Brasil. En ese mismo reportaje, agregó sobre Bolsonaro: “Me pareció muy bueno cómo desde el primer día decidió enfrentar a la izquierda”, agregando que “Tengo una agenda clara, que va en contra de todo lo que sea socialismo o comunismo. Todos los que están contra el socialismo o el comunismo están del lado en el que estoy yo”.

“Con un currículum académico de primer nivel, sumado a su verborragia, gesticulaciones, agresividad verbal y afirmaciones estrambóticas, se convirtió en un personaje interesante y hasta divertido para la audiencia”

Ante estas respuestas explosivas, el medio brasilero no dudó en calificar al diputado nacional argentino de ser un fenómeno de culto entre sus seguidores.
Por otra parte, Milei ratificó su adhesión incondicional al “Foro de Madrid”, una agrupación internacional que busca englobar figuras y partidos de derecha para oponerse al “Foro de San Pablo” y al “Grupo de Puebla”, que son de izquierda. También aseguró que “Para mí, Trump es uno de los mejores presidentes de la historia de Estados Unidos. Cada lugar tiene su dinámica temporal. No cambiaré mis concepciones por lo que suceda en otros lugares del mundo”.
Si bien afirma que no tiene aspiraciones presidenciales, sus acciones lo demuestran algo contradictorio, dado que desea que La libertad Avanza se convierta en un partido político con influencia a nivel nacional.

Bocasucia, descontrolado, y carismático
Críticos no le faltan al flamante diputado nacional. Andrés Jaroslavsky publicó en The Independent el 6 de enero pasado lo siguiente: “Un nuevo fenómeno se destaca en los medios: un candidato mitad economista, mitad bufón, el 'libertario' Javier Milei obtuvo más del 17% en la ciudad de Buenos Aires”.
Por su parte, los dirigentes de Juntos por el Cambio le tienen mucho temor al nuevo diputado, porque el electorado de Milei provino, en gran parte, de ese espacio político. Y razones no les faltan. La Libertad Avanza tiene un buen marketing, más novedoso, que el de los partidos tradicionales. Un ejemplo de esto fue la gran convocatoria que tuvo el sorteo del primer sueldo de Milei como diputado, para el que se inscribieron 1.040.622 personas. Un dato más que interesante, porque el partido La Libertad Avanza consiguió 313.808 votos en las últimas elecciones legislativas.
Envalentonados por esta avalancha de inscriptos (que triplicó la cantidad de votantes), colaboradores de Milei aseguran que “Antes era el kirchnerismo contra Juntos por el Cambio, ahora es la política contra nosotros”. Algo difícil de comprobar, ya que el ganador del sorteo fue un kirchnerista confeso, un trabajador de la construcción que dice amar a Cristina Kirchner, pero que se sorprendió gratamente al comprobar que Milei “cumplió con lo que prometió”. Más allá de la sorpresa del afortunado trabajador (por el cumplimiento de una promesa de campaña), nadie puede asegurar que votaría a Milei para un cargo ejecutivo.
Sin dudas, Javier Milei canaliza la bronca y desesperación de los argentinos con su discurso anti-sistema, anti-casta política y con expresiones verbales políticamente incorrectas. Un ejemplo del léxico grosero utilizado públicamente por el diputado nacional contra políticos y funcionarios de distinto nivel lo demuestra claramente: “Pedazo de mierda, por qué no estudiás, h.d.p.”; “Zurdo de mierda, te aplasto, sorete, gusano arrastrado, pelado asqueroso de mierda”; “Torre de estiércol, pedazo de mierda”; “Inútil, no decís un porongo, mentiroso h.d.p. y la c. de tu madre”; “ “Por qué no te vas a la c. de tu madre”, “H.d.p., la c. de tu madre, pedazo de mierda”; “Tontito, bobito, pedazo de pelotudo, te hacés el boludo, la c. de tu madre, estúpido, idiota”; “Chorro y burro”; “Parásito chupasangre”…
Pocos adversarios políticos se salvaron de sus insultos, llegando a una ofensa y discriminación extrema contra Axel Kicillof, gobernador de la Provincia de Buenos Aires, a quien llamó “enano diabólico” (por su corta estatura).

Capitalizando el descontento popular
Javier Milei, con sus expresiones descontroladas, representa gran parte del malestar de los argentinos. Y como el malestar ciudadano aumenta sin cesar debido a la decadente situación económica, la inseguridad, la inflación y la pandemia de Covid-19, es probable que la estrella de Milei ascienda en paralelo en el campo político. ¿Hasta dónde? Es difícil vaticinarlo.
Un caso similar al de Milei es el de Elisa Carrió, quien estuvo muchos años en política con discursos y expresiones altisonantes, pero sin llegar a ser elegida para un cargo ejecutivo. Pero también puede compararse con las carreras de los mediáticos Donald Trump y Jair Bolsonaro.

“Sin dudas, Javier Milei canaliza la bronca y desesperación de los argentinos con su discurso anti-sistema, anti-casta política y con expresiones verbales políticamente incorrectas”

Objetivamente, la argentina retrocede en todos los rubros desde hace décadas. Se empobrece a ritmo vertiginoso, y nadie quiere o puede mejorar el estado de las cosas. Es un hecho que todos los gobernantes que se suceden en la argentina dejan el país en peor situación que cuando asumieron.
Seguramente, dentro de la frustración generalizada muchos verán a este diputado como una salida al actual estado de cosas. Pero no hay certezas.
Como nadie sabe nada, es imposible asegurar hasta donde llegará el fenómeno Javier Milei.¤