Una de las Siete Maravillas Naturales
Las cataratas del Iguazú son un conjunto de 275 saltos en el río Iguazú, en el límite entre la provincia argentina de Misiones y el estado brasileño de Paraná. Al norte de la provincia de Misiones, en el límite con Brasil, se encuentran las majestuosas cataratas del Iguazú: una de las Siete Maravillas Naturales del Mundo y, sin dudas, uno de los lugares más espectaculares de Latinoamérica.
Tanto su ubicación en medio de la selva como su descomunal volumen de agua y numerosos saltos las convierten en un sitio inolvidable y de obligada visita en todo viaje a Argentina.
El salto de mayor altura de las cascadas del río Iguazú se llama Garganta del diablo. Se trata de un conjunto de cascadas de 80 m de caída que en conjunto forman las cataratas de mayor caudal del mundo.
Mejor época para visitar las cataratas de Iguazú
El lugar se puede visitar en cualquier momento del año, pero si es posible, conviene evitar los meses de diciembre a marzo, porque el calor puede ser excesivo, y julio, el mes de vacaciones y de mayor afluencia de visitantes.
Paseo popular
Otro paseo popular para los viajeros que deciden viajar a las Cataratas del Iguazú, es cruzar el Puente Internacional de la Amistad, que conecta Foz con Ciudad del Este, en Paraguay. Esta ciudad es un paraíso para los buscadores de rebajas, donde pueden conseguirse gran variedad de productos a bajos precios, especialmente en electrónica y perfumes. También desde Puerto Iguazú puede hacer tours muy recomendados, como recorrer las minas de amatistas en Wanda y las ruinas de San Ignacio Miní, una antigua misión jesuita abandonada a mediados del siglo XVIII, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Parque Nacional Iguazú
Con el objetivo de proteger las majestuosas Cataratas del Iguazú, fue creado el Parque Nacional Iguazú -cuyo nombre significa Agua Grande en el idioma del pueblo originario guaraní. Posee alrededor de 67.620 hectáreas que fueron declaradas Patrimonio Natural de la Humanidad por la UNESCO en 1984, debido a sus bellezas escénicas y a la gran diversidad biológica.
La visita del parque es además una oportunidad para conocer la selva subtropical, con una flora autóctona con más de 2000 especies, y avistar animales como el mono carayá, los atrevidos coatíes, aves coloridas como tucanes, loros y urracas, y los increíbles vencejos (que anidan en las rocas detrás de las cascadas de agua).
Entre la incontable variedad de insectos, se destacan, naturalmente, las mariposas. ¤