Una bebida tradicional del verano en el cono sur
Refrescante cóctel de vino y frutas para celebrar las fiestas de fin de año
El clericó es una adaptación del inglés Claret Cup, un cóctel o ponche que fue inmensamente popular entre los británicos durante los años 1800. Aunque esta bebida ha perdido popularidad en los países angloparlantes, su elaboración sigue siendo una tradición en Argentina, Paraguay y Uruguay, especialmente durante las festividades de fin de año. El clericó es una bebida refrescante a base de vino tinto y frutas, ideal para los días calurosos de verano.
La preparación del clericó comienza con una ensalada de frutas, que puede incluir naranja, manzana, durazno y frutillas. Se añade un poco de azúcar a las frutas, se mezcla bien y se deja reposar para que liberen sus jugos. Luego se vierte el vino tinto y se pueden añadir otras bebidas alcohólicas como Bordeaux rosé, vino blanco, brandy, sidra o champagne, así como agua carbonatada y hielo.
El resultado es una bebida deliciosa y refrescante, perfecta para compartir en reuniones familiares o con amigos.
En España existe una bebida similar llamada sangría, aunque se presenta en jarras de vidrio en lugar de punch bowls.
Es común que las familias en Argentina tengan una ponchera de cristal tallado en exhibición en el comedor, rodeada de sus tazas de cristal a juego, lista para preparar y servir este tradicional cóctel.
Ingredientes
• Naranja
• Manzana
• Durazno
• Frutillas
• Azúcar
• Vino tinto
• Otras bebidas alcohólicas opcionales (Bordeaux rosé, vino blanco, brandy, sidra, champagne)
• Agua carbonatada
• Hielo ¤