Cartas y más Cartas - Septiembre 2015

Sr. Director:
Luego de leer la entrevista con el señor Carlos Bernhard (El Suplemento, junio 2015), me emocioné mucho porque habla de los Glostermeteor. Tengo varias anécdotas acerca de ese jet, y aunque no quiero tomar mucho de su tiempo me agradaría hacer unas reseñas de algo que sucedió aproximadamente 63 años atrás. Ingresé a la escuela de aprendices en nuestra querida fábrica militar de aviones en 1952; éramos como 900 aprendices en el primer año, y fuimos invitados a un desfile militar en Buenos Aires, creo que un año antes de la revolución del '55 y estuvimos estacionados en El Palomar.
Durante el primer año teníamos tareas en diferentes áreas de la FMA, y me tocó trabajar con los técnicos especializados en los Gloster en el pabellón 90. Quizás el senor Bernhard haya visitado esa área.
La FMA fue pionera en aviación, como lo fue la industria automotriz (moto Puma, Rastrojero, etc.) En la parte de aviación recuerdo el Pulqui 1 y el Pulqui 2. El Pulqui 2 y el MIG 15 soviético fueron hechos en base a los mismos planos de la aviación alemana y en el restaurant Proud Bird, al frente de LAX, sobre Aviation Blvd., hay numerosos aviones y se puede ver un MIG 15 que es exactamente igual al Pulqui 2.
Durante los años que menciona el señor Bernard y en medio de la revolución cayó un Gloster en Barrio Alto Alberdi. El piloto era el Teniente Morandini; en ese período vivía en Barrio San Martín y pudimos presenciar ese trágico desenlace.
Siguiendo con mis anécdotas y referente a la escuela de aviación, se filmó una película titulada “La última escuadrilla”, en la que su actor, Juan Carlos Barbieri, tenía que volar un DL-DL y por coincidencia, un día en Los Angeles fuimos a un recital de Los Cuatro de Córdoba, no recuerdo el año. Había una persona en la fila y le pregunté si era Juan Carlos Barbieri. Era él; lo saludé y hablamos de La última Escuadrilla.
Para terminar, quiero felicitar al autor de la mencionada entrevista, a todos los colaboradores de esta prestigiosa revista, y al Sr. Garriga por todos los años trabajando para que nos enteremos de cosas tan lindas y tantos recuerdos que nos emocionan.
Un abrazo,
Vicente M. Castro
Hawthorne, CA
ES: Estimado Vicente, gracias por compartir con nosotros sus conocimientos sobre aviones argentinos. Un abrazo.

¡Basta de nostalgia!

Sr. Director:
La perversa campaña (no dudo que la organizaron Uds.) contra Payador Ebrio, no hace más que enaltecer la figura del Sr. Intendente. Como dijo Dostoievski en el Quijote: “Ladran Pancho, señal que cabalgamos”.
Estimado Roberto: déjalos ladrar y sigue cabalgando, no te estanques como tus detractores. Con mucho respeto a la Sra. Malena (me suena a tango) que irrespetuosamente critica al Sr. Intendente Alzola, le recuerdo que la fogata (tradicional acto de inconsciencia) de San Pedro y San Pablo, era resistida por la mayoría de los vecinos, por el riesgo de incendios que año tras año se daban, lo mismo que por los cortes de la calle, el humo y otros inconvenientes. Sobre los muchachos bailando en la calle, entre ellos seguro que se acogieron a la proposición 8. Malena, ¿se acuerda cuando le ponía los zapatitos a los reyes y pastito a los camellos? Qué lindo, ¿no? Pero eso es pasado, y hay que vivir el presente; este es otro mundo.
Leí muchas cartas de gente que dice disfrutar de El Suplemento, pero solo cuando algún amigo se lo hace llegar o les llega casualmente a sus manos. Este mes yo compré tres suscripciones ($33 dólares c/u por un año) y tres de mis amigos con problemas de movilidad lo van a recibir en su casa. Esto ayuda a solventar la revista; no hay que ser muy listo para saber que El Suplemento no es muy rentable (es hecho a puro corazón) y si todavía lo disfrutamos es por el esfuerzo que hacen sus colaboradores y plantel estable. Démosle una mano, porque aunque hay otras (también muy buenas), El Suplemento es la única “revista argentina” ¡Intendente Aguante! No hay Suplemento sin Payador Ebrio.
Lectores: escriban para que Cartas y más Cartas sea un espacio para polemizar amigablemente.
José Ruben,
Woodlan Hills, CA
ES: Estimado José, es nuestro deber informarle que no fue Dostoievski quien escribió el Quijote, sino William Shakespeare. Empezó mal, pero terminó bien. Esperamos que otros lectores sigan sus sugerencias. Un abrazo.

Senadores: vuelvan a trabajar

En el mes de mayo de este año se votó la ley de Tránsito en la Cámara de Diputados del Congreso de La Nación. En el proyecto que elaboramos en la Asociación Madres del Dolor se establece que si alguien conduce con exceso de alcohol en sangre o a exceso de velocidad y luego atropellan y matan o se dan a la fuga, eso se considere un agravante. Aunque nosotras pedíamos que el agravante fuera de 4 años de mínima y 7 de máxima, y se votó con 3 de mínima y 6 de máxima, igualmente apoyamos el proyecto, que fue votado en forma favorable en mayo de este año en Cámara de Diputados. Desde mayo, sigo al proyecto en Cámara de Senadores, pero:
Mayo: los Senadores estaban en campaña.
Junio: Los “honorables” Senadores no iban al Congreso porque estaban en sus provincias por las elecciones.
Julio: Receso Invernal. No había nadie en el Congreso.
Agosto: Estudiando el resultado de las elecciones; los “excelentísimos” Senadores no están.
La muerte no espera. La sociedad necesita la ley.
Necesitamos que vuelvan a trabajar pronto. Para eso reciben el sueldo que les pagamos todos.
Viviam Perrone, mamá de Kevin Sedano
Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
ES: Gracias, Viviam, por comunicarse con nosotros otra vez y por mantenernos al tanto de las vicisitudes de las leyes de tránsito en Argentina. “Senadores trabajando” parece un oxímoron en nuestro país, pero no se puede dejar de seguir demandando que lo hagan. ¤