En Argentina, un asado es un ritual que uno comparte con familiares y amigos, casi siempre en el jardín de una casa, aunque su origen está en el campo. Los mega asados-evento, donde se cobra entrada y cualquiera puede ir, son una verdadera rareza.
Distinto es en Los Angeles, donde los asados-evento tienen una larga tradición en la comunidad argentina. Recordemos que, al ser el asado nuestro plato nacional, organizar un asado aquí es una manera de juntarse y festejar con algo propio de nuestra cultura. El buen clima y la abundancia de casas y parques facilitan la organización.
Según los registros históricos, el primer asado-evento o Fiesta Gaucha se hizo para festejar la Fiesta Patria de 1967. Lo organizó la por entonces flamante Asociación Argentina de Los Angeles, y tuvo lugar en el Verdugo Park. En los años siguientes, el Club Argentino de Los Angeles fue el encargado de los asados. ¿Por qué? La cercanía entre nuestras fechas patrias hizo que, a pesar de la rivalidad entre las organizaciones, hubo un acuerdo básico. El Club Argentino organizaba los asados-evento para festejar el 25 de Mayo, y la Asociación hacia los bailes/fiestas del Día de la Independencia.
Ángelo Lombardo, histórico asador del Club Argentino y hoy un ilustre residente de Glendale, nos cuenta: “Todo empezó en los sesenta... El presidente Ernesto Eichberg era el responsable final de la organización, pero yo estaba orgulloso de formar parte de un grupo que hacía casi todo. La cita era en el Hand Ball Park de La Puente y una vez llegamos a alimentar a 2000 personas. Era sin duda el gran evento argentino del año”. ¿Cómo eran? La entrada costaba 5 dólares, y además de la comida había carreras de sortijas en bicicleta y de embolsados, con premios a los ganadores.
El Club Argentino desapareció en los ochenta, y con él los asados más grandes y memorables de esta historia. Luego, otras organizaciones intentaron ocupar ese lugar. Por ejemplo, la Asociación de Padres de la Escuela Argentina, que en los noventa organizó asados-evento como forma de juntar fondos para la escuela.
Hoy, la gente de Proyecto Herencia de Amor sigue con la noble tradición, con seis años de asado-evento al hilo. ¿Asados? En realidad, Fiestas Gauchas donde tal cual la tradición, hay un poco de todo: campeonato de truco, concurso de baile, shows y mucho más. El objetivo hoy es juntar fondos para la construcción de una Escuela-Comedor y Centro Deportivo en Mercedes, Buenos Aires. El último asado fue el pasado domingo 28 de septiembre, en el Disabled American Veterans Club de Woodland Hills, al que concurrieron unas 600 personas. ¤