La popularidad de las empanadas, y especialmente la empanada argentina, es un dato de la realidad de Los Angeles. Hoy se venden en lugares donde antes no existían, como los Farmer's Market, se mencionan en la prensa anglo, y si por algún motivo aparecen en algún rincón gastronómico de la ciudad, la respuesta suele ser muy buena. Otras ciudades norteamericanas no se quedan atrás; algunas, incluso, llevan la delantera. En Miami, por ejemplo, las empanadas están disponibles por todas partes, y hasta en varios sitios del aeropuerto internacional. En Denver, Colorado, una empresaria argentina -Lorena Cantarovici- se está haciendo famosa vendiéndolas. En definitiva… las empanadas hoy son un éxito en los Estados Unidos. ¿Una moda? Algo más que eso.
Como casi todos sabemos, vender empanadas en los Estados Unidos no es algo totalmente nuevo, ya que llegaron con las primeras corrientes inmigratorias argentinas. Aquí en Los Angeles, hasta existen un puñado de negocios especializados, pero siempre tuvieron una popularidad discreta. Entonces el tema es ¿por qué esta locura por las empanadas hoy?
Todos los indicios apuntan a Miami. En los últimos veinte años, a la tradicional comunidad cubana se le sumaron importantes números de argentinos, colombianos y venezolanos, y da la casualidad que la empanada es un plato familiar y favorito para todas esas comunidades.
Un dato clave para el marketing y el crecimiento: es prácticamente el mismo tipo de empanada, el mismo tamaño y la misma forma, solo con diferencias menores en las recetas. Es cierto, existe una tendencia de las comunidades caribeñas hacia la empanada frita, y no al horno. Pero todo eso también sucede dentro del universo de las empanadas argentinas, ¿no?
El tema es que de golpe un mismo producto estuvo respaldado gustosamente por varias comunidades latinas, garantizando su fama en la ciudad de Miami. Y Miami -una ciudad estratégica que recibe millones de visitas todos los años- terminó siendo una vidriera gigantesca para la empanada. Con esta visibilidad, su fama en todo los Estados Unidos era solo una cuestión de tiempo.
Pero hay una palabra en inglés que también ayudó mucho a la empanada: “Delicious!” No es un dato menor que la empanada gusta, y mucho. Fuera de Miami, son los argentinos los que parecen estar detrás del negocio de ofrecer empanadas y eso puede ser porque al hacerlas al horno tienen la ventaja de ser vistas como más sanas, y los argentinos (y chilenos) pueden ofrecer una larga historia de dedicación especial a este plato. ¿El resultado? Unas empanadas sensacionales que ganan adeptos en toda la unión.
¿Con quién compiten las empanadas en los Estados Unidos? ¿Otras comidas similares? La ventaja que tiene la empanada en Estados Unidos es que, a diferencia de Inglaterra y otros países, no se han popularizado tanto los “pies” pequeños de distinto tipo. Estos “pies”, de ser populares, hubiesen sido una competencia formidable. Existe el burrito, el tamal, y la menos conocida chimichanga, pero todos con una historia tan distinta a la de las empanadas -en esencia y distribución- que se resume en una sola cosa: realmente no son competencia. Ni en el aeropuerto de Miami, ni en el Farmer's Market de Los Angeles.
El tema es que todo indica que la empanada empezó una curva ascendente de popularidad. Y a medida que entra en el consiente norteamericano, se acerca el día en que vamos a ver empanadas argentinas en los principales supermercados, incluso las congeladas.
Una de las cosas lindas de la globalización… ¤