“Desfavorecido”, un cortometraje de Rafael Lanús

Un Ángulo Diferente para una Historia que se Repite
Desfavorecidos es el título con el que Rafael Lanús decidió expresar el gran problema que significa la ilegalidad en el país en el que vivimos. Nunca mejor elegido, ya que el director aborda el tema desde una perspectiva diferente a la acostumbrada. En este corto no hay oficiales inmigratorios, ni fronteras llenas de peligro cruzadas por la noche; en este caso se trata de los chicos, inmigrantes e hijos de inmigrantes, aquellos que apenas comprenden esa situación límite que han pasado y en la que en algunos casos todavía están sus padres. Y ellos. Lo que la hace diferente, también, es que muestra que el problema se extiende más allá de la comunidad mexicana: impacta en todos, vengamos de donde vengamos.

El corto es la historia de Tomás, a punto de terminar su secundaria, buen estudiante, excelente deportista; y de su familia: mamá abandonada por su esposo y un hermano menor, Benji, ambos adolescentes. Madre e hijo mayor sin papeles, hijo menor ciudadano. Hablan español con mamá, inglés entre ellos. Amor a este país y al fútbol. Naturalmente habituados a un golpe cultural que vienen piloteando por años, repentinamente surge el cambio que trae el crecimiento, el futuro, que viene acompañado por el despertar a esa realidad oculta por muchos años para los adultos, pero por toda la vida para los hijos. Estamos frente a un simple acto de amor y protección poco deliberado, que súbitamente pone en riesgo lo anhelado, exige decisiones difíciles, expone ambos lados de una misma realidad, y finalmente nos enfrenta al destino mismo, totalmente fuera de control cuando parecía navegar en aguas calmas.
Los que siguen mis críticas saben que para mí los cortometrajes, tantas veces desvalorizados, tienen el potencial de convertirse en trampolines mediante los cuales un buen director puede trazar y consolidar su horizonte dentro del mercado cinematográfico, ese en el que juegan los chicos grandes. Desfavorecido es la prueba fehaciente de ello. En menos de 15 minutos cuenta una historia de vida completa, sin resultar escasa ni redundante. Limpia, clara, concisa y contundente. Una pequeña obra de arte.
Escrita y dirigida por Rafael Lanús, quien en entrevista exclusiva nos cuenta: "Hace 13 años que estoy acá, soy casado y tengo un hijo de 15 años, tengo 35 años y manejo una agencia de fotos en Los Angeles. Soy fotógrafo profesional, con más de 10 años de carrera y el cine es básicamente fotografía en movimiento, obviamente un poco más complejo, así que tuve que aprender otros conceptos, como dirigir actores, movimientos de cámara, etc., por eso estudié dirección en la UCLA."
Dice que le encanta contar historias con imágenes, y se define como muy humano y sensible. Al momento de hablar del tema central, comenta que "con tantos años acá, siempre me llamó la atención lo duro que debe ser para los chicos que se crían acá desde muy pequeños, que conocen muy poco sus países de origen, pero que a la vez no son legales acá, entonces es como que no son ni de acá ni de allá". Es por eso que eligió contar esto como su primera historia. El corto ya fue invitado a varios festivales:
Beverly Hills Film Festival, Awareness Film Festival (Los Angeles), Short Film Corner (Cannes, Francia) y The Other Venice Film Festival.
"Se hizo con cero budget y un montón de gente que me ayudó", cuenta, mencionando particularmente a otro argentino, el maestro Emilio Kauderer, excelente profesional y mejor amigo, siempre presente a la hora de aportar lo suyo y a quien entrevistamos con motivo del suceso de El Secreto de sus Ojos.
Sus planes para el futuro incluyen seguir con su agencia de servicios fotográficos para la industria, grosbygroup.com y con la productora que abrió este año. ©