Juego de destreza de los 80
Antes del tiki taka futbolero, estilo creado, según los entendidos, por el holandés Johann Cruyff y perfeccionado por el legendario Barcelona de Pep Guardiola y Lio Messi, existió un juego de destreza del cual el fútbol robó su nombre.
El tiki taka argentino al que nos vamos a referir hoy, no es al toque de los mediocampistas y delanteros de la selección de fútbol, sino a ese juego que en algún momento intentó arrebatarle una porción de popularidad al yo-yo y al balero. El tiki taka, al igual que sus mencionados primos, era un instrumento sumamente básico formado por dos bolas de plástico duro entrelazadas por una cuerda que terminaba en un anillo por el cual el jugador debía pasar un dedo. El juego requería no poca habilidad y coordinación: se comenzaba por mover la mano rítmicamente para hacer que las bolas chocaran entre sí, aumentando el arco hasta que en el momento preciso (y esto solo lo lograban los jugadores avezados) las bolas llegaban a golpear tanto abajo como por encima de la mano.
Quizás los más entrados en años recuerden sin demasiado cariño algún ojo morado o chichón en la frente, producto de un golpe no intencionado.
Los campeonatos de tiki taka se hicieron populares a comienzos de los 80, aunque luego su uso se fue diluyendo con el tiempo. Hoy es posible comprar en Argentina un tiki taka de los originales, o incluso un par de los de nueva fabricación. ¤