Salvado a último momento
Un abogado está llegando tarde a una reunión importantísima y no encuentra lugar para estacionar el coche que maneja. Eleva las manos al cielo, cierra los ojos e implora:
– Señor, por favor, ¡consígueme un estacionamiento y te prometo que iré a misa todos los domingos del resto de mi vida, dejaré las drogas, el alcohol, y no me acostaré más con mi secretaria, la casada!
Instantáneamente, aparece un lugar para estacionar en la puerta del edificio de la reunión. El abogado estaciona y dice:
–Ya no te preocupes, Señor, ¡encontré uno!
Dos X uno
Un hombre encuentra a su vecino cavando un hoyo en el patio y le preguntó:
- Hola, vecino, ¿qué hace?
- Cavo un hoyo para enterrar a mi pez.
- ¿Y no es un agujero demasiado grande?
- ¡Es que el pez está dentro de tu maldito gato!
Tres de psicoanalistas
Un joven llega a su sesión con su psicoanalista, y muy alterado le dice:
- Tuve un sueño muy extraño anoche, escuchaba a mi madre que me hablaba y hablaba y de repente la veo y ¡tenía su cara! Se puede imaginar la noche que pasé, mi mamá hablándome sin parar y con la cara de mi terapeuta…
Me desperté de golpe y no pude dormir más.
Me quedé acostado esperando que amaneciera, me levanté y apenas pude desayunar un pedazo de tostada y vine directamente a verlo.
Espero que usted pueda ayudarme a descifrar el significado de este sueño...
El psicoanalista lo mira un instante y le dice:
- ¿Un pedazo de tostada? ¡Y llamás a eso un desayuno!
- Doctor, no sé qué tengo. Hace un mes que no puedo ni comer ni dormir ¿Qué tengo?
El psicoanalista, sin mayor reparo le responde: -¡Hambre y sueño!
Psicoanalista:
- Cuénteme. ¿Cuál es su problema?
- Soy una mujer de carácter débil, los hombres consiguen de mí todo lo que quieren y luego tengo remordimientos de conciencia.
- Ah, su caso no es tan difícil. Hay muchos métodos para reforzar el carácter.
- Pero doctor, usted no me entendió... Lo que yo quiero es no tener remordimientos después.
Modales
El mayordomo atentamente le abre la puerta, agacha su cabeza y reverencialmente lo saluda:
- Adelante, ¿de dónde mierda viene el señor con su usual cara de culo?
- De comprarme un audífono, pelotudo... Estás despedido.
Especies
-Mamá, ¿qué es un lobo de mar?”
-Es un bicho que tiene muy feo olor, se la pasa tirado al sol, haciendo fiaca, peleando por hembras y juntando grasa. Además, es mamífero.
-¡Cómo el hombre!
-No, para ser como el hombre le falta el fútbol y el control remoto.
Cortos y de mala ortografía
—Encontramos al sujeto muerto.
—¡Ah, caray! A ver cómo se lo decimos al predicado.
—Tú y yo ¿qué somos?
—Pronombres.
Nuestro amor es determinante: primero demostrativo; después, posesivo; luego, indefinido; al final, un numeral más.
—Dame un ejemplo de complemento circunstancial de tiempo.
—Un paraguas.
—Voy a despedir al nuevo periodista.
—¿Por qué?
—Le pedí un artículo que ocupara una página completa y me envió un “EL” enorme.
En un centro de oftalmología:
—Su hija es daltónica.
—¿Es grave?
—No, señora, es esdrújula.
Un problema de sintaxis ocurre cuando hay huelga de transporte.
La mala ortografía es una gravísima enfermedad textual.
—No eres tú, es tu ortografía.
—Entonces, ¿ya no nos vamos haber?
—Papi, me fue mal en el examen de español que me ayudaste a preparar. Siento mucho haberte defraudado.
—No te preocupes, hijo; lo hacido, hacido está.
De Choborras
Un borracho le dice a otro:
- Tienes que dejar de beber... te estás poniendo borroso.
Dos de Chinos
Un cliente le pregunta al mozo del restaurante chino:
- Oiga, mozo ¿qué clase de carne era la que he comido?
- Ela calne de lata.
- ¿Cómo es posible, si era buenísima y fresquísima, cómo va a ser carne de lata?
- Calne de lata que cole.
Un condenado a muerte está pasando su última noche en capilla. Recibe la visita del alcalde, quien se pone a dialogar amablemente con él.
-Bueno, ya sabes que a los condenados a muerte se les concede un último deseo. ¿Quieres alcohol?
-No, gracias.
-¿Cigarrillos, quizá?
-Tampoco.
-Bueno, di qué es lo que deseas.
-Me gustaría aprender el idioma chino por correspondencia... ¤