Un verdadero amigo
Un amigo que está en la ruina envía un e-mail a otro:
-Si no me envías 200 dólares, secuestro a mi hijo y después me suicido.
Respuesta:
-Ahí tenés 100 dólares… y dejá a tu hijo en paz.
Recibido
El juez interroga al acusado:
- ¿Practica usted la prostitución?
- No, señor juez... la practiqué hace mucho tiempo, ahora la ejerzo.
Compasivo
- Mamá, hay un pobre señor afuera gritando. ¿Me das dinero para darle?
- Bueno, pero ¿que grita el pobre hombre?
- ¡Heeeladoooossss!
Triste final
-Che... ¿de que murió Jorge?
-De cataratas.
-¿Lo operaron?
-No, lo empujaron.
Dos borrachos
Estaban dos borrachitos en un bar cuando ya estaba por cerrar.
-Oye cumpa, ¿por qué no vamos a mi casa para seguir chupando?
-No, mejor vamos a la mía que es aquí cerquita.
-No cumpa, la mía es más cerquita.
-A ver, vamos, a ver cuál es más cerca.
Y se van, llegando a la esquina se detienen y uno le dice al otro:
-Ya llegamos cumpa, esta es mi casa.
Y el otro le dice:
-No puede ser cumpa, ésta es mi casa.
-No te creo, es la mía.
-A ver, toquemos el timbre así sabremos de quién es.
Tocan el timbre, sale la dueña, y les dice:
-¡Qué bonito, padre e hijo borrachos!
Siniestro… y pelotudo
Se encuentran dos amigos en un bar y uno le dice al otro:
-Estoy tan aburrido con mi mujer que me tiene al borde del suicidio.
Entonces el amigo le contesta:
-No seas tonto, ¿cómo te vas a matar? ¡Eliminala a ella!
-Pero ¿cómo?
-Hacele el amor todo el día, si es posible 4, 5, ó 6 veces diarias hasta que caiga exhausta.
Se encuentran los amigos dos meses después y el que se quejaba de su señora estaba flaco, ojeroso, pálido y con aspecto cadavérico. Su amigo le dice:
-¿Y? ¿Cómo te fue con el asunto?
-Ahí anda la tontona, silbando y cantando, lo más feliz, ni sospecha que se va a morir...
Total franqueza
-Gordi, hace demasiado calor y tengo que cortar el césped, ¿creés que losvecinos dirán algo si salgo desnudo?
- Creerán que me casé contigo por el dinero…
Arrugas
Estaba en la sala de espera para la primera cita con una dentista nueva. Leí su nombre completo en el diploma y recordé una chica alta muy esbelta, de pelo oscuro bien largo, compañera de clase en el bachillerato hace poco más de 30 años. ¿Sería el mismo bombonazo que me gustaba en ese entonces?
Al verla descarté la idea rápido; tenía arruguitas en la cara, con pelo entrecano, y estaba muy vieja para ser mi compañera... ¿o era?
Al terminar el examen le pregunté si había asistido a la preparatoria Morgan Park.
- Sí -contestó orgullosa.
- ¿Cuándo te graduaste? - pregunté.
- En 1969, ¿por qué pregunta?
- ¡Estabas en mi clase! -exclamé.
Me miró de cerca y la muy atorranta me dijo:
- ¡Qué coincidencia¡ ¿Qué materia enseñaba usted?
Un confundido en terapia
Nuevo grupo, de cuatro pacientes. En la primera reunión, el psicólogo les pide que se presenten, informen su actividad y comenten por qué la han elegido.
– Me llamo Julio y soy médico, porque me gusta que la gente esté sana.
– Me llamo Ángel y soy arquitecto, porque me gusta que la gente viva en casas bonitas.
– Me llamo María y soy lesbiana… porque me gustan los senos y los traseros femeninos y hacer el amor con mujeres.
– Me llamo Manolo y hasta hace un momento pensaba que era albañil… pero ahora veo que soy lesbiana.
Cortitos y al pie
- Andresito, ¿qué planeta va después de Marte?
- Miércole, señorita.
Vovotchka le dice a su maestra:
- Maria Ivanovna, te amo.
Ella enrojece:
- Vovotchka, no me gustan los niños pequeños.
- No te preocupes, tomaremos precauciones.
En la escuela, la maestra dice:
- A ver, Luis, ¿cómo te imaginás la escuela ideal?
- ¡Cerrada, señorita! ¤