Nada de malo
Sr. Director:
Reciban mis más efusivos saludos al comenzar un nuevo año de publicación de El Suplemento. Vuestra revista ha pasado un nivel de madurez envidiable por otras publicaciones del género.
Recuerdo vívidamente aquella noche fuera de la entrada al Teatro Alex, en Glendale, cuando usted me confió que estaba preocupado pues aún no había dado con ningún título apropiado para la nueva publicación. Yo le contesté: “¿Y qué tiene de malo El Suplemento?” Obviamente nada de malo y mucho de bueno, pues El Suplemento se ha convertido en una publicación seria, respetable y que llega a todos los rincones de la heterogénea colectividad argentina.
William A. Alvarez, MD
Long Beach, CA
ES: Muchas gracias, estimado William, por seguir con nosotros otro año. Muchas cosas han cambiado a lo largo de todo este tiempo, pero El Suplemento sigue firme, desde el título hasta la última página. Un abrazo.
Más vale tarde
Sr. Director:
Mi intención era mandarles saludos navideños y buenos augurios para el año próximo, pero unas estupendas vacaciones en Mendoza, tierra de los mejores vinos, pusieron mis prioridades patas para arriba y la buena vida hizo que me retrasara en el saludo. Las fiestas ya pasaron, pero el 2017 recién comienza, así que aquí van mis deseos de que El Suplemento goce otro año más de éxitos en nuestra comunidad, y que todo el staff de la revista viva este año con la mayor de las felicidades.
Hago extensivos mis saludos a todos los compatriotas que leen la revista en todo el sur de California.
Ana Laura García
Pasadena, CA
ES: Estimada Ana, nunca es tarde para desear felicidad. Feliz año, y gracias por acompañarnos otro año en esta misión de acercar a la comunidad argentina por estos lados.
Sus deseos son órdenes, Toli
Sr. Director:
Empezamos un año que promete ser movidito, ¿no? Material sobre qué escribir supongo que no les va a faltar, comenzando por el convulsionado clima político que se vive por estos lados y siguiendo por la siempre cambiante situación en Argentina. Me gustaría sugerirle que se encarguen de informar sobre los “manteros” (vendedores callejeros no-ambulantes) que pululan sobre todo en la ciudad de Buenos Aires, y que el gobierno de la Ciudad está en estos momentos intentando combatir en el barrio del Once. Detrás de ellos, muchos humildes trabajadores que intentan ganarse la vida vendiendo lo que sea en las veredas, existe toda una organización mafiosa que los explota, y que además aprovechan la situación para encubrir muchas otras actividades ilícitas. Nosotros tenemos un departamento sobre la Avenida Pueyrredón, a unas cuadras de Once, y cada vez que vamos la zona está peor.
Sin más, los saluda atentamente,
Rogelio “Toli” Sastre
Venice, CA
ES: Estimado Toli, como podrá ver, en este mismo número informamos tanto del “convulsionado clima político por estos lados” como de la situación de los “manteros” en la ciudad de Buenos Aires. Un abrazo y gracias por escribir. ¤