Pioneros del rock y blues en Argentina
Rony, un amigo, me dejó la inquietud de esta legendaria banda. Al referirse a ella mostró supasión y fanatismo a la música nacional, es por eso -y un poco dedicada a él y a nuestros lectores- que hoy recordamos a “Manal” Buscando en archivos se encuentran muchas cosas acerca de su historia, como así también algunos calificativos que terminan por formar un resumen de su historia musical como un “grupo funcional”.
Originalmente fueron bautizados como “Ricota” y se presentaban en La Cueva buscando ser reconocidos. Con poco éxito luego de varios “demos” rechazados, tuvieron que crear su propio sello discográfico, llamado “Mandioca”, de la mano de Jorge Alvarez, un viejo amigo de la banda, y Pedro Pujol. Esto se pudo dar y así sacaron su primer simple “Que pena me das” y “Para ser un hombre más” durante 1968. Fueron precursores del rock y de los blues en Argentina. Su primera edición de discos quizá no fue de lo más fuerte y, con un poco más de 300 copias lanzadas, llegó a un pequeño público y no al resto, ya que, por la época, sus temas eran catalogados como raros.
Las primeras presentaciones del trío fueron en la sala “Apolo”, para luego llegar durante el verano del '69 a Mar del Plata presentándose junto a la primera formación de Los Abuelos de la Nada. Durante este verano siguieron con presentaciones por el país y contando en algunos shows con la participación de “Pappo” como primera guitarra.
Su segundo simple fue “No Pibe” y “Necesito Amor” La primera, para muchos, fue considerada la canción más importante para el Rock Nacional. La consagración llegaría durante el Festival Pinap en 1969 y ya mostraba una solidez instrumental admirable debido a la gran cantidad de presentaciones que venían realizando.
Consagración y separación:
No eran tiempos felices en nuestro país y se vivía en dictadura cuando Manal estaba surgiendo y la difusión del rock no era permitida en ningún lugar, mucho menos grupos como Manal o Almendra, que fueron los pocos que siguieron adelante contando historias de la vida diaria y de la difícil situación por la que pasaba el país.
Durante 1970 sale su primer LP “Manal” y rompe con todos los moldes de que no se podía hacer buen blues en castellano, y queda demostrado con temas como “Jugo de Tomate” y “Avellaneda Blues” A este LP le podemos agregar el éxito de “Una casa con 10 pinos” y “Avenida Rivadavia”.
El éxito, y una fuerte oferta por parte de una discográfica más comercial como RCA, llevan a Manal a sacar un nuevo disco: “El León”, con el que no logran la repercusión que habían tenido con el primero y se produce un fracaso inminente del disco.
Luego de otros trabajos con poca repercusión y una baja en las ventas, sumado a los problemas que tenían Javier Martínez, Claudio Gabis y Alejandro Medina, llega la inevitable separación de la banda. Luego de esto, los integrantes pasaron a formar, junto al legendario Billy Bond y otros, “La pesada del Rock & Roll”.
La vuelta:
Quizá nadie podía esperar que tantos años después, un grupo como Almendra se volviera a juntar, y mucho menos se esperaba tanto éxito, es por eso que llegados los '80, Manal decide volver realizando cuatro presentaciones en Obras y editando el LP “Reunión” durante el '81. Con temas nuevos fueron tocando por las ciudades más importantes del país para terminar esta gran presentación nuevamente en Obras con “Chau Manal”, recitales que luego fueron editados en el disco “Manal en Obras”
En Agosto del '87 reaparece Manal, pero sólo con Javier Martínez y con músicos como Aldo Yacomino en guitarra y Jorge Lacovelli en batería, Jorge Szavso en teclados y saxo como así también Luis de León en bajo.
El Final:
El último regreso de Manal se produce en 1994. Ya no está Gabis, por lo cual, se suman Claudio Rodríguez y Carlos Vidal junto a los legendarios Javier Martínez y Alejandro Medina para con su nuevo, y quizás último Manal, presentarse en The Roxy.
Cada uno de los originales de Manal tomaron rumbos separados. Cuentan por ahí que Gabis enseña música en España; Martínez batió el récord tocando batería en Francia por 41 horas y en Argentina por 48 horas, además de editar discos como solista; y Medina, como todos sabemos, es uno de los mejores bajistas que dio el país y sigue presentándose en muchos escenarios de Buenos Aires.
Hasta que apareció Manal no se sabía del blues en castellano. Este grupo lo llevó a la gente con la calidad que muy pocos lo pudieron hacer. Seguramente no serán recordados por batir récords vendiendo discos o haciendo presentaciones, pero nadie podrá olvidar, como no lo hace mi amigo Rony, de la voz ronca de Javier Martínez, como del genial Gabis y la potencia increíble de Medina; aunque lo más importante que se va a recordar es cómo llevaron con su música, la realidad social que nuestro país vivía en esos momentos.
Fuente: Página del Rock Argentino