Conforme a las Leyes de Indias, el virreinato del Río de la Plata sólo podía tener relaciones comerciales con España. Pero el comercio con dicha metrópoli era mínimo, puesto que este país daba prioridad a otros puertos y además se encontraba en guerra en Europa y también sus barcos eran presas de los piratas. Por lo tanto, para poder conseguir los productos necesarios, se ingresaban mercancías inglesas por medio del contrabando.
Se formaron así en Buenos Aires dos grupos de poder; los hacendados que reclamaban la apertura comercial para poder exportar fácilmente sus producciones de cuero y derivados vacunos y los comerciantes que obtenían grandes ganancias con el contrabando y que, por supuesto, querían que se mantuvieran las restricciones para así poder cobrar por los productos ingleses precios superiores a los que cobrarían si el mercado fuese legal.
Al llegar el nuevo virrey Baltasar Hidalgo de Cisneros reemplazando a Santiago de Liniers, quiso congraciarse con los ingleses y con los hacendados abriendo el comercio. Pero los comerciantes presionaron y lograron convencer al nuevo virrey que volviera a cerrar el comercio con Gran Bretaña.
Un importante grupo de estancieros que no se consideraban adecuadamente representados por el Cabildo, pidieron a Mariano Moreno que defendiera la apertura económica. Mariano Moreno publicó entonces una " Representación de los Hacendados" en la que promovía el libre cambio, atacaba los privilegios de los monopolistas y defendía el interés exportador de los ganaderos.
De acuerdo a los actuales historiadores, este documento sobre economía, fue el más completo escrito durante el virreinato.
Moreno formuló en él fuertes críticas al proceder económico del régimen colonial, sustentándose en las ideas liberales económicas que surgían en Europa y que comenzaban a ser conocidas en América. Se apuntaba a que se debían establecer relaciones comerciales con Inglaterra. Decía Moreno: ¿Qué cosa más ridícula puede presentarse que la vista de un comerciante que defiende a grandes voces la observancia de las leyes prohibitivas del comercio extranjero a la puerta de su tienda, en que no se encuentra sino géneros ingleses de clandestina procedencia?"
Moreno escribió con lucidez vanguardista. Supo ver la potencia de una clase emergente, la de los agricultores y labradores de lo que sería luego la Provincia de Buenos Aires. Además quiso convencer al virrey de la necesidad de modificar el esquema económico y del necesario acercamiento a las necesidades de los ruralistas.
Su proclama, sin embargo, no tuvo respuestas de Cisneros, pues como consecuencia de los debates generales sobre el tema, se abrió la aduana, pero en forma limitada.
La postura de Moreno funcionaría posteriormente con el gobierno patrio.©