Un pueblo histórico en el norte de Salta
Si bien se puede visitar Iruya todo el año, lo más recomendable es hacerlo fuera de la temporada de lluvias, principalmente porque en caso de que viajemos en bus o en automóvil particular, puede complicarse el acceso.
La temporada de lluvias comienza en diciembre y se extiende hasta marzo, por lo cual es recomendable planear su visita de abril a noviembre. Muchos planean viajar en enero o febrero, cuando tienen vacaciones, y en esos meses siempre hay probabilidades altas de lluvias, además de un extremo calor. En estos casos, lo mejor es averiguar el día antes cómo está el clima en Iruya y el estado de los caminos. Principalmente, por el fenómeno al que los lugareños llaman volcán, que no es otra cosa que el río que crece rápidamente por las lluvias torrenciales o continuas, se desborda y ocasiona un alud de barro y piedras que arrasa con todo, y puede cortar el camino.
Si decide realizar el viaje durante el verano, que es plena época lluviosa, va a descubrir un entorno verde y ríos con mayor caudal, que le agregan un plus al paisaje. Si su visita coincide con las fechas de Carnaval, va a poder ver las rondas de coplas, que se realizan igual que hace decenas de años.
A principios del otoño, entre marzo y abril, también hay características que embellecen el paisaje ya que se llena de unas flores amarillas silvestres, semejantes a las margaritas.
En invierno, todo lo va a encontrar seco, aunque la ventaja es que ningún día va a llover, y ya empezando la primavera, los árboles se llenan de brotes, devolviéndole un poco de verde al paisaje, aunque la tierra aún sigue seca.
Cómo llegar
Para acceder a Iruya, se debe pasar por la provincia de Jujuy, recorriendo la ruta Nacional Nº 9. A 26 km de la capital de Cafayate está el cruce de rutas, donde se lee “Iruya 26 Km”. Siguiendo el camino indicado, se llega a la estación Iturbe (F.C.N.G.B.), Provincia de Jujuy, distante a 8 km.
Mirador de la cruz
Un punto imperdible para visitar en la ciudad de Iruya es el Mirador de la Cruz. A este mirador se accede por un sendero moderado y permite excelentes vistas de una de las ciudades más famosas del noroeste argentino y del fascinante paisaje que la rodea. Es muy importante tener protección solar, ya que es una zona muy soleada, y tener ropa fresca, sobre todo en verano.
Iglesia Nuestra Señora del Rosario y San Roque
Emplazada en la entrada al pueblo, la pequeña iglesia de Iruya se encuentra bajo la advocación de Nuestra Señora del Rosario y San Roque. La Iglesia de Iruya tiene una sola nave y una torre lateral sobre la derecha dividida en tres cuerpos.
Su construcción responde a las típicas edificaciones religiosas de la Quebrada y la Puna. El simple interior de la iglesia tuvo modificaciones en el sector del altar. El púlpito es de madera policromada y cuenta con seis caras.
La Iglesia fue fundada hacia 1753, según algunas fuentes documentales.
La primitiva Iglesia, de las mismas dimensiones de la actual, mantenía aún muchos de los rasgos típicos de la época a comienzos de ese siglo, pero sucesivas reformas fueron despojándola de todo esto. Actualmente, sólo la estructura general, junto con las imágenes, nos recuerdan a esa época.
La techumbre era de barro y paja en la parte exterior y el interior estaba recubierto de caña brava. El piso era de adobe de gran tamaño, sin que se sepa con certeza cuando se pintó un zócalo alrededor de la Iglesia en color azulado con dibujos de torres, pájaros y platas.¤