Siguiendo con los animales, digamos que al sapo se lo ha relegado a las profundidades del cuerpo humano, al decir: “El que come y no convida, tiene un sapo en la barriga.” Otros seres tienen mejor suerte. Tal es el caso de las aves, sobre las que hallamos los siguientes refranes: “Pájaro que comió voló” , “Una golondrina no hace verano “(aparece en la obra de Fernando de Rojas), “Mas vale pájaro en mano que cien volando” y “Un ave sola bien no canta ni llora (Que conocemos por el Arcipreste de Hita ).
Existe un refrán muy poético: “El pájaro canta hasta morir.”
Pero también otro muy tétrico: “Cría cuervos y te comerán los ojos”, pues si se beneficia a ingratos, éstos se servirán de esas mismas armas, “para pagar bien con mal.”
Se considera por los adivinos que: “Ave muda no puede dar buen agüero.”
Por el lado de los consejos se establece: “No gastes pólvora en chimangos” y “Al ave de paso, cañazo”, pues no se debe tener trato íntimo con forasteros o transeúntes.
También se dice que: “Ave de pico, no hace al amo rico”, dado que el ave que sólo sirve para cantar, es difícil que de ganancia alguna.
Deja establecida las fatales consecuencias de la embriaguez el refrán: “De las aves que alzan el rabo, lo peor es el jarro”.
Es imposible que se avengan las personas que interesadamente se dirijan al mismo fin. Lo deja afirmado el refrán: “Dos aves de rapiña, no tienen compañía.”
Uno de los animales que ofrece una gran variedad de refranes es el buey.
Desde “El buey solo bien se lame “, pasando por “Entre bueyes no hay cornadas” y por “Buey lerdo, bebe agua turbia”, llegamos a lo que afirma Martín Fierro. Dice el refrán que “en la tropa nunca falta un buey corneta”.
Con “¿A dónde ira el buey que no are?” ¨se indica que en todos los oficios hay trabajos que sufrir. “A buey viejo no le cates majada, que él se la cata”, se refiere a que no se debe aconsejar y advertir a los experimentados. “Al buey viejo múdale el pesebre y dejará el pellejo” con lo que se avisa sobre el peligro de hacer mudar de clima y de alimentos a los ancianos. “Con el buey por el asta y al hombre por la palabra” se significa que tan sujeto está el hombre que compromete su palabra, si es honrado como el buey uncido por las astas” “Buey frontudo ,caballo cascudo”, establece las cualidades que deben preferirse en los animales de una y otra especie
Con “Buey viejo, zurco derecho” se afirma que la experiencia es siempre ventajosa en el terreno de la práctica. Se dice también “El buey bravo, en tierra ajena se hace manso” porque en país extraño procedemos con mucha mas cordura, moderación y templanza, por faltarnos el apoyo que tenemos en la patria.
“El buey que me acornó, en buen lugar me echó”, puesto que algunas veces la desgracia nos depara alguna fortuna.
“El que no tiene buey ni cabra, toda la noche ara”, previene que el carecer de medios necesarios para algún fin ocasionará muchos desvelos
“El ruin buey, holgando se descuerna” reprende a los que aparentan fatigarse o se fatigan por poca cosa.
Y dejemos a los bueyes tranquilos en los campos, mientras buscamos refranes relativos a otros animales.
Mientras tanto recuerden: que “Sapinentes portant cornua im pectora, stulti in fronte” Ø