Es posible, pero llevaría unos dos años y costaría 450 millones de dólares o más.
El Gobierno de Argentina rechaza reflotar al submarino ARA San Juan: “Es una operación imposible a esa profundidad” (900 metros), según declaró el ministro de Defensa argentino Oscar Aguad. “No es una decisión del Ejecutivo, es que no se puede”, agregó. Aguad dijo además que no hay antecedentes de que sea posible reflotarlo.
Yo les puedo confirmar y demostrar que sí hay antecedentes y que sí es posible reflotar el submarino. Que los antecedentes concretos prueban que sí es posible reflotar un submarino más pesado y en el fondo del mar a cinco veces de mayor profundidad. El problema es el costo.
Antecedentes: En 1974, el barco Glomar Explorer reflotó un submarino nuclear soviético, el K-129, que se encontraba a una profundidad de 4,900 metros.
El Departamento de Defensa y Agencias de Seguridad de Estados Unidos modificó el barco para esta operación de gran interés para la seguridad del país, al obtener un submarino nuclear soviético con misiles balísticos intercontinentales con armas nucleares. Este fue un gran logro de Estados Unidos en el desarrollo de la tecnología de reflotación de submarinos.
Costo: Al menos 450 millones de dólares. El costo podría ser algo mayor, dependiendo de las dificultades que encuentren, tales como la solución al riesgo, o a la posibilidad que se quiebre en partes al levantarlo. Por un lado están los familiares y todos los ciudadanos que apoyan el pedido de reflotarlo, y por otro lado el alto costo y la situación económica del país que influye al gobierno a decir que no tiene el dinero para hacer la operación de reflotación.
Lección: Hubo factores tecnológicos de falta de mantenimiento apropiado, errores de administración y errores humanos, como la decisión de los comandantes de sumergirse y seguir el camino directo en vez de navegar en forma perpendicular hacia la costa, hacia la zona de 200 metros o menos de profundidad para hacer las reparaciones. Hay que hacer las reparaciones en una zona de menor profundidad, donde se hace más accesible el rescate de los marinos en caso de complicaciones.
Beneficios: Al reflotarlo, este proceso traerá confort y cierre de duelo a todos los familiares. Y algún nivel de sanación y recuperación para las familias y para todo el país. También se sabrá con más detalle y precisión cuál fue la causa de la explosión y de su caída a 900 metros de profundidad. Será un gran aprendizaje para la Armada Argentina y para la protección de las vidas de los tripulantes de submarinos en el futuro. También, este proceso le ayudará a Argentina a desarrollar las tecnologías de rescate para su propia flota de submarinos en el futuro.
Una vez más, El Suplemento expresa nuestras sentidas condolencias, compasión y apoyo solidario a todos los familiares de los 44 marinos muertos en el accidente.
El Dr. Miguel Angel Moreno es Físico Atómico y Espacial, Ex-Senior Scientist de la NASA y Profesor de Física Atómica y Espacial ¤