Sr Director:
Lo saludo y hago un pequeño comentario acerca de la pelea de Sergio Martínez, el pasado día 27 de abril. La verdad, me sigue decepcionando este pibe; no solo ganó ahí nomás, sino que no pudo noquear a su contrincante, quien además era un paquete. Para colmo de males, sigue queriendo mostrar una destreza que no posee, un talento único que solo poseía Nicolino Locche. No me imagino que pasaría con “Maravilla” si todavía se peleara a 15 rounds; tendría que tener el tubito de oxígeno pegado en la espalda. Martínez siempre pelea con la guardia baja; no se cuál fue su escuela, pero esto en el boxeo por lo menos no es muy recomendable. Voy a esperar el comentario del experto en box, Carlos Avilas. Quizá yo estoy equivocado. Un gancho y la seguimos en el próximo número.
Adrián Miranda
ES: Estimado Adrián, coincidimos con tus opiniones, aunque tu gancho nos agarró, como a “Maravilla”, con la guardia baja.
Humor verde
Sr. Director:
Soy un argentino radicado en los Estados Unidos desde 1957 y siempre he gozado de la lectura de su muy interesante e informativa revista. Pero, para ser honesto, debo expresarle mi desilusión y tristeza cuando llego a la Página de Humor, pues ella no refleja la buena educación y buen gusto de un argentino, o por lo menos, de aquellos que como yo podemos titularnos “los de la guardia vieja”. Veo con preocupación que esa página, que debiera ser una fuente de regocijo sano para todos los miembros de nuestras familias, se ha ido convirtiendo poco a poco y seguramente sin que usted se haya apercibido de ello, en una muestra de la parte baja y hasta obscena de nuestra patria. En lugar de presentar a Argentina como una población de gente educada y respetable, como en el pasado ha sido considerada, estos chistes están degradando tal concepto y por mi parte ya no me es posible compartirlos con mis hijos ni con mis nietos, como desearía hacerlo, para mantener en ellos el respeto a nuestro país y cultura que siempre he tratado de enfatizar.
El humor siempre me ha gustado, y me agrada compartirlo con la familia y con amigos cuando es de calidad, lo cual, triste es decirlo, no puedo hacer con la Página del Humor de El Suplemento. ¿Sería mucho apelar a su educación y experiencia para que directamente intervenga para impedir que esta triste situación vuelva a repetirse en próximas ediciones de su de muy necesaria revista?
Con todo respeto dejo a su consideración mi muy sentido pedido.
César Marestaing
Santa Ana, CA
ES: Estimado César, tomamos en cuenta su pedido y gracias por su colaboración. Y entre nosotros... ¿conoce el del linyera y la monja que se encuentran en un sótano...?
De Lujo
Sr. Director:
A pesar de haber llegado ya hace unos meses a California, fue mi hermana, quien vive en el barrio porteño de Belgrano, quien me informó de la existencia de El Suplemento (ella la encontró en el Internet). A partir de entonces, la leo cada mes con mi familia y hasta se la paso a un compañero de trabajo colombiano. Luego de vivir varios años en Boston, debo confesarle que me siento muy feliz de contar con un medio como el suyo, argentino, y a la vez “de acá”.
Disfruto mucho de la lectura de todas las notas de política, opinión, deportes y artistas locales, aunque me gustaría que agreguen alguna sección de ciencia y tecnología, que es mi pasión.
Un abrazo para todo el staff y de paso saludo a toda la comunidad argentina y sudamericana a través de este medio.
Ana Bollini
Sharman Oaks, CA
ES: Estimada Ana, agradecemos tu comentario y la recomendación de tu hermana, a la que le avisamos, por si aún no lo sabe, que El Suplemento cuenta además con una edición argentina y otra española. Un abrazo. ¤