En realidad una zarigüeya
Su nombre real es zarigüeya (Didelphis albiventris), pero en Argentina todo el mundo la conoce como comadreja, muy común por las zonas rurales del país. En realidad, el uso de este nombre es una deformación de los criollos que usaron el nombre de un animal ya conocido en Europa para designar una especie típicamente sudamericana. Esto es el caso también del coipo, llamado “nutria”, o la mara, llamada “liebre”. La Zarigüeya argentina no tiene nada que ver con la verdadera comadreja (Mustela nivalis) que es un animal del hemisferio Norte; de hecho, ni siquiera están emparentadas. La zarigüeya es un marsupial, es decir, ¡es prima del canguro y del koala!
Se la encuentra en toda la parte Noreste de la Argentina –desde Córdoba hasta Misiones– además de Paraguay, Uruguay y Brasil. Es muy abundante, porque se adapta a ambientes diversos, tanto selva como pastizales, y hasta se la puede encontrar en ciudades y zonas con fuerte presencia humana. La comadreja sale de noche y suele descansar de día en madrigueras que ella construye, o también aprovecha los huecos en algunos árboles. De hecho, es una buena trepadora y se ayuda de su larga cola para agarrase.
Desgraciadamente, tiene mala fama. Cuando se siente en peligro, su reacción es bastante impresionante: hace chillidos como un gato abriendo la boca y libera un olor desagradable. Además, le gusta comerse gallinas y otras aves de corral, y por eso suele ser muy perseguida. En realidad, su dieta es omnívora. Come desde frutos hasta insectos y arañas, y tiene un rol muy importante en la regulación de plagas y dispersión de plantas.
Al ser un marsupial, su particularidad es la presencia de una bolsa, el marsupio, donde permanecen los bebés una vez nacidos. En el caso de la comadreja, la gestación dura apenas 2 semanas, y luego las crías permanecen unos 45 días en la bolsa. Cuando salen, la madre los va transportando a lomo durante 3 a 4 meses y sólo vuelven al marsupio para amamantarse. Los bebés nacen entre septiembre y mayo. Una misma hembra puede tener hasta 2 camadas por año, de un promedio de 6 crías cada una.¤