Leyenda patagónica
El piguchén, una serpiente de plumas con dos cabezas, puede convertirse en un ave, en una rana o en un sapo.
También conocido como pihuchen o pihuechengú, se trata de una suerte de serpiente cubierta de plumas, al que se ha divisado en ocasiones poseyendo dos cabezas de ofidio. Dadas sus dos naturalezas, es capaz de convertirse a voluntad en un ave similar a una gallina o en una rana o sapo de mirada penetrante, similar al basilisco.
Es eminentemente nocturno, y vuela sobre los poblados emitiendo un chillido peculiar que pone sobre aviso a los habitantes del lugar, ya que el piguchen es considerado un hematófago (es decir, se alimenta de sangre, animal o humana), por lo que los rastros de ese elemento dejados sobre la corteza de los árboles o sobre los pastos se deducen como obra suya. ¤