El gigante de los montes guaraníes
Se trata de un gigante que habita los montes del área guaraní, en la zona del litoral, donde están las maravillosas Cataratas del Iguazú. Es un varón de estatura gigantesca, de extrema pilosidad y enorme cabeza, al que se lo vio fumando una macabra pipa compuesta de un cráneo y huesos humanos. A pesar de su terrible aspecto, el Caá-porá puede ser bueno para los hombres que se topan con él: como vive en los sectores más inaccesibles del monte, sólo los cazadores tienen alta probabilidad de encontrárselo y, si el motivo de la cacería es proveerse de alimento, el caá-porá quizás guíe a los perros de presa hasta las fieras. Sin embargo, si considera que los cazadores sólo buscan dañar a los animales bajo su protección, el caá-porá puede devorar a los animales que el hombre mata para que la cacería no tenga éxito, hacerse invisible y golpear a los perros de presa para que pierdan el rastro o sencillamente atacar a los cazadores y asesinarlos, devorándolos luego.
Si un cazador regresa de su viaje atontado y con los sentidos adormilados, se sabrá que ha sido víctima de uno de los duraderos embrujos del caá-porá. ¤