Editorial • Junio 2003

¡Nos salvamos de Menem!
Al menos el 75% de los argentinos está contento por este simple hecho. Y la esperanza es inevitable. Ojalá nos dure hasta fin de año para brindar por nuestro país con alegría.

Dos meses después de derrocado Sadam, la mitad de los iraquíes sigue sin agua ni electricidad; los jubilados y los empleados públicos sin cobrar; crimen y vandalismo casi sin control; colas de “cuatro millas” para cargar nafta y el antiamericanismo creciendo. Sin vestigios de las 500 toneladas de gas mostaza y agentes nerviosos, ni de los laboratorios móviles y subterráneos produciendo ántrax que denunció Powell en las Naciones Unidas. “Ahora el mundo es un lugar más seguro”, dijo Bush y Al Qaeda le respondió con más ataques terroristas. Sin embargo, llenó los formularios para su reelección en el 2004. ¿Y la economía? Bueno, les cortó impuestos a los ricos para generar más empleo. Quizá tomen más mucamas.

“Au pays des aveugles les borgnes sont rois”
(en el país de los ciegos, los tuertos son reyes)
Antiguo refrán francés