El joven equipo de un joven técnico que cortó una racha de 28 años sin títulos
Después de 28 años sin festejar ningún título, el 10 de julio pasado Argentina gritó campeón en el Maracaná frente a Brasil, de la mano de un técnico que hizo la renovación de jugadores que nadie se animaba a hacer. El flamante campeón es un plantel formado por chicos jóvenes con hambre de ganar para darle un merecido estímulo al capitán Lionel Messi, y con jugadores experimentados a los que les tocó jugar menos, pero que alentaban y se comprometieron con este proyecto, sabiendo que podía ser una de sus últimas oportunidades de levantar una copa con la Selección. Después de seis finales sin poder ganar, la Selección Nacional pudo romper la mufa.
El equipo fue de menor a mayor; primero tenían que conocerse, jugar juntos y entenderse. Muchos pasaron y se quedaron en el camino, pero también, muchos se sumaron a último momento. Jugadores que nunca habían visto a la Selección ganar un campeonato, fueron a Brasil con un solo objetivo: llevar la copa a Argentina.
La Copa América 2021 quedará en el recuerdo como la primera que se jugó en medio de una pandemia mundial. Se disputó en Brasil debido a la elevada cantidad de casos de Covid-19 que tenía Argentina y la mala situación política y social en Colombia. La albiceleste empezó con un empate con Chile, pero fue en subida para ganarle 1-0 a Uruguay, 1-0 a Paraguay, 4-1 a Bolivia y 3-0 a Ecuador, hasta llegar a semifinales, donde se encontró con Colombia y pudo pasar tras una tanda de penales y una increíble actuación del arquero Emiliano Martínez.
El pase a la final significaba enfrentarse al equipo más fuerte del torneo. A pesar de ser una buena prueba para ver cómo estaba parado el equipo, también era una gran oportunidad para dar el batacazo. Al principio del encuentro, a la selección le costó encontrar el gol, que llegó en el minuto 22', más tarde de lo que nos tenía acostumbrados, pero Ángel Di María le dio el triunfo parcial, de la misma manera que lo hizo en la final de los Juegos Olímpicos Beijing 2008. Durante los 90', Brasil no pudo terminar de acomodarse y a pesar de que Argentina intentaba llegar al segundo, también le costaba. En el minuto 87' Messi se pierde el gol que le hubiera dado la victoria final, pero, aun así, Argentina terminó ganando el partido.
Cuando el árbitro terminó el encuentro, todos fueron a festejar con el capitán. Los jóvenes del recambio sabían que esta copa era para y por él, junto a todos los históricos que nunca pudieron terminar de consagrarse. En Argentina, muchísima gente se reunió en el obelisco y en diferentes puntos del país para celebrar la victoria.
Algunos jugadores argentinos hablaron luego de conseguir este título:
“Es una locura; es inexplicable la felicidad que siento. Me ha tocado irme triste, pero sabía que en algún momento se iba a dar. Confiaba mucho en este grupo que se fue haciendo muy fuerte desde la Copa América pasada. Es un grupo de personas muy buenas, que siempre tira para adelante, que nunca se queja de nada”, expresó el capitán, y añadió: “Fueron muchos días encerrados, pero el objetivo estaba claro y pudimos ser campeones. La felicidad es inmensa. Muchísimas veces soñé con esto. Todavía no somos conscientes de que fuimos campeones, de lo que logramos. Pero creo que va a ser un partido que va a quedar para la historia, no solo por haber sido campeones de América, sino porque además le ganamos a Brasil en su país. Le dije a Fideo (Di María) que hoy iba a tener su revancha, y así fue. Quiero compartir esto con aquellos compañeros que estuvieron tantas veces tan cerca y no se les dio. Esto también es para ellos”.
Rodrigo De Paul, una de las figuras de la selección de Lionel Scaloni, dijo que “Esto es más de lo que soñamos. Ser campeón en el Maracaná contra Brasil supera todo tipo de expectativa. Soy muy feliz. Messi necesitaba de todos, y nosotros lo necesitábamos a él. Es el mejor de todos los tiempos. En este momento de incertidumbre para el país, siento que ahora la gente se volvió a abrazar. Todavía no caigo. No sé cuándo lo voy a hacer, pero ese día voy a llorar mucho”.
El defensor “Cuti” Romero llegó a la final lesionado, pero a pesar de no estar 100% le pidió al técnico jugar, y cuando terminó el partido declaró: “No me lesiono casi nunca, tenía una bronca terrible. Cuando pasamos a la final, dije que no me la perdía ni loco. Hablé con los médicos y por suerte pude llegar, pude jugar y aportarle al equipo. Desde el primer día que llegué a la Selección hicieron que me adapte de la mejor manera. Le agradezco a Leo (Messi), al Kun (Agüero), a Fideo (Di María) y a toda esa camada que nos recibió tan bien”.
El delantero del Inter, Lautaro “Toro” Martínez, declaró: “Es algo soñado, indestructible. Hemos sido justos ganadores y hay que disfrutar. Hay gente nueva, hay chicos con hambre, venimos empujando. Dejamos hasta lo que no teníamos hoy. Es un claro ejemplo de cómo hay que defender esta remera, este escudo, este país. Estoy orgulloso del trabajo que hicimos y estoy feliz por mi familia”. El delantero de la Selección Argentina complementó: “Había poco para hablar antes del partido: estaba todo el escenario en nuestras manos. Era una Copa que se tendría que haber jugado en Argentina. Se disfruta el doble porque jugar con Brasil siempre es especial. Esta medalla la voy a guardar para toda la vida. Hemos quedado en la historia de la Selección, pasó mucho tiempo sin ganar un título y hoy rompimos con eso”.
El notable arquero del seleccionado argentino, Emiliano Martínez, comentó: “No hay palabras para explicar este momento. Era un sueño que tenía de chico. Me fui al Arsenal con 17 años en busca de una vida mejor para mi familia. Y después de mucho esfuerzo, llegó este momento, este Maracanazo. Yo lo dije hace unos meses: queríamos darle un título al mejor del mundo. Le dije a mi mujer que este era mi sueño y me bancó. Todavía no pude conocer a mi hija (recién nacida)”. Sobre la obtención de la Copa, confesó: “Todavía no caigo, quiero disfrutarlo con mi familia, abrazar a mi hija. Pasé muchas cosas, gente que no confiaba en mí, pero esto queda en la historia. Lo hicimos. Esta pandemia nos hace sufrir a todos los argentinos, y esto es para ellos”.
Por último, Ángel Di María, declaró: “Todavía no puedo llorar, no termino de caer. Soñamos tanto, peleamos tanto por lograr esto. Mucha gente nos decía que no volvamos, pero nos seguimos dando la cabeza contra la pared y hoy se rompió la racha”. Sobre el gol, dijo que: “Rodrigo (De Paul) me dio un pase perfecto. Terminó como el partido contra Nigeria, como en los Juegos Olímpicos”. También expresó su felicidad: “Estoy feliz por mis hijas, por mi mujer, por mis viejos, por toda la gente que nos bancó y por todos los locos que vinieron acá. Viene un Mundial dentro de poco y esto es un envión muy grande. Va a ser inolvidable. Messi me dijo que era mi final, que era la revancha por las finales que no pude jugar. Tenía que ser hoy... y hoy fue”. ¤